10/6/08

Campo, por Carlos Oquendo de Amat






El paisaje salía de tu voz
y las nubes dormían en la yema de tus dedos

De tus ojos cintas de alegría colgaron
la mañana

Tus vestidos
encendieron las hojas de los árboles

En el tren lejano iba sentada
la nostalgia

Y el campo volteaba la cara a la ciudad.







en Cinco metros de poemas, 1927