9/4/20

Conciencia, por David Lynch






A través de la meditación se capta lo ilimitado.
Que lo ilimitado es feliz.
Que no hay felicidad en lo pequeño.
Upanishads


Los peces pequeños nadan en la superficie, pero los grandes se esconden mucho más abajo. Si logras expandir el contenedor en el que pescas —tu conciencia—, puedes pescar peces mayores.

Funciona así: dentro de todo ser humano hay un océano de conciencia vibrante, pura. En la meditación trascendental, cuando «trasciendes» te zambulles en ese océano de conciencia pura. Chapoteas en él... Y es la gloria; una gloria que te hace vibrar. Experimentar la conciencia pura la estimula, la expande. Empieza a desplegarse y crecer.

Si tienes la conciencia del tamaño de una pelota de golf, cuando leas un libro, lo que entiendas de él tendrá el tamaño de una pelota de golf; cuando mires por la ventana, lo que captes será como una pelota de golf; cuando te despiertes por la mañana, tendrás una vigilia como una pelota de golf; y a lo largo del día, una felicidad interior del tamaño de una pelota de golf.

Pero si logras expandir la conciencia, hacerla crecer, al leer el libro, lo entenderás más; al mirar por la ventana, verás más; al despertarte, tu vigilia será mayor, así como tu felicidad interior a lo largo del día.

Podrás pescar ideas a un nivel más profundo y la creatividad fluirá. La vida se parecerá más a un juego fantástico.



en Atrapa el pez dorado, 2008