9/4/19

El amor que resplandece, por David Miralles





La noche nos reduce
en esta plaza
y es nuestro el amor que resplandece
más allá de las torres asediadas:
de las malas palabras que cerramos
y que ahora ceden
bajo el peso de los cuerpos.

El viento entra en la ciudad
rendida a nuestros pies
que ignoran
el camino de regreso hacia la madrugada.

Lo demás podría no existir en esta hora
en que volvemos a vencernos.



en Los malos pasos, 1990